A veces las cosas mas lindas empiezan sin que lo sepamos.
Hace 7 años entre estudios médicos, cansancio, t ganas de encontrar un momento para mi, agarre una aguja y un ovillo de hilo. No sabia que un gesto tan simple me iba a cambiar la vida.
Tejí mi primer muñeco con nervios, con dudas con mil errores y millones de destejidas.....pero también con ilusión. Era para Emma, mi hija.
En ese momento, lo único que quería era hacer algo con mis propias manos que ella quería y deseaba.
Y ahí empezó todo. Sin plan, sin pensar en marcas, sin imaginar que un día esto se llamaría Agueda Crochet.
Tejer se volvió mi cable a tierra, mi espacio para conectar con lo lindo
Con el tiempo, tejer se volvió mi cable a tierra. Algo que me ayudaba a bajar las revoluciones, a conectar con lo lindo, a sentirme útil cuando todo lo demás era un torbellino. Y de a poco, lo que era solo para mi hija, empezo a ser para otros bebes, para otras mamas, para quienes buscaban un regalo con amor.
Hoy Agueda es una marca registrada, pero sobre todo un proyecto familiar. Acá participamos todos: Yo tejo, pero también soñamos juntos, armamos pedidos, sacamos fotos, respondemos mensajes. todo en FAMILIA.
No es solo un emprendimiento....es parte de nuestra vida.
Si llegaste hasta acá, gracias por estar del otro lado, Cada amiguito que se va de mi taller lleva un pedacito de historia. Y eso, para mi, es lo valioso,